Antes de que la onda corra por el medio, la materia luminosa , sonora , olfativa y gustativa ( que es la misma ) se encuentra en reposo, aguardando en posición de guerra la revolución o la descarga, lo que venga primero . La pulsión simple de un botón desparrama cristales ominosos de zinc , materia prima de la luz y de las canciones de cuna . Aunque no pueden ser vistos por el ojo humano, no por el tamaño , sino por la extraña paradoja de que ellos son la materia prima de la visión misma , los cristales ominosos se acumulan en grupos de aproximadamente diez cristales , logrando una pelotilla que corre a 4/5 de la velocidad de la luz y que se estrella contra los ojos con tal potencia y frecuencia , que crea una imagen ilusoria de un mundo exterior, que así nos duela, no tiene colores en si mismo, es oscuro, inoloro , insaboro y terriblemente confuso .
De esta forma cuando uno ve venir por la calle a la persona que mas se quiere en el mundo, olvida que abrazará a una conjunción poética de átomos, moléculas, sustancias , proteínas y un compartimento donde alguien puso una fuente de energía , un canalizador de impulsos eléctricos y unas gavetas almacenadoras . Nos engañamos permanentemente ante el como te fue hoy en la oficina mi amor, como estuvo tu día, bien , muy bien, conseguí un gran cliente . Y como te fue a ti , muy bien, me compré unas flores divinas, son rojas y huelen delicioso . Que equivocados.
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